La izquierda no está interesada en ilustrar a los niños y adolescentes españoles. Quiere adoctrinarlos en su “verdad”, sin dejarles margen para otra. En la forma, no enseñan, catequizan; en el fondo, buscan apoderarse de las almas, en la que dicen no creer. Son tan enemigos de la cultura como de la libertad, porque las temen, y harán cuanto esté en su mano para que las próximas generaciones de españoles alcancen el pleno analfabetismo.
Esto lo ha escrito un columnista de un periódico de la derecha.