NUNCA ES TARDE…
Por José González Pertíñez.
Sin tópicos ni necesidad de más llantos sobre el difunto, aunque en este caso, gracias a Dios, nuestro querido P. Mendoza esté vivo y muy vivo para muchos años, ya es hora de reconocer públicamente tantos méritos acumulados.
El P. Mendoza ha quemado su vida junto a nosotros sin pedir nada a cambio. Más que padre ha sido madre, en unos años difíciles por sus carestías de afecto y comprensión. Supo llenar el difícil hueco dejado por el P. Gómez en unos momentos de dificultades económicas y afectivas. A él le debemos las primeras aperturas sentimentales, por llamarlas de alguna forma, con aquellos guateques femeninos, cuando las chicas aún estaban “estigmatizadas” con el fuego medieval de la separación absoluta de sexos.
Su comprensión, su aliento y apoyo son y serán imborrables; continúan vivos, después de nuestra salida del colegio, por lo que es nuestra visita obligada por el agradecimiento, cuando regresamos a Úbeda, pues es el cordón umbilical que nos une a la casa madre y un testigo excepcional de nuestra difícil adolescencia.
Enhorabuena por tan feliz idea, a la que me adhiero de todo corazón y comparto con tantos jóvenes que han tenido la suerte de contar con el P. Mendoza en su vida.
FIGURA MODÉLICA
Por Antonio Lara Pozuelo.
Respetable señor:
Cordobés de nacimiento, viví en Úbeda como alumno de magisterio de la Safa entre 1954 y 1963, probablemente los años que marcaron de modo decisivo mi personalidad y que, por ello, llegué a creer que algo de ubetense tienen mi manera de pensar y comportamiento. Desde el año 1959 tuve la suerte de beneficiarme de los consejos, no sólo espirituales, de don Jesús Mendoza Negrillo. Siempre me impresionaron, su vasta cultura, su generosa disponibilidad y altruismo, su atención, delicadeza y respeto en el trato con el otro, sea cual fuere su condición. Hoy, doctor por la Universidad Suiza de Fribourg, catedrático en la Universidad, también suiza, de Lausanne y a casi cinco décadas del término de mis estudios en la Safa ubetense, de cuya Asociación soy miembro fundador, hoy recuerdo con agradecimiento y respeto la figura modélica del P. Jesús Mendoza. Siempre he pensado en él como personalidad relevante del genio ubetense (no sabía yo que era de Begíjar) por su agudeza intelectual, sensibilidad y generosidad de espíritu.
Todo lo dicho me conduce a comunicarle mi incondicional adhesión para que las autoridades del respetable Ayuntamiento de Úbeda concedan a don Jesús Mendoza Negrillo el sin duda merecido título de Hijo Adoptivo de tan noble ciudad.
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Publicado en: 2006-02-07 (58 Lecturas)