Por Fernando Sánchez Resa.
En aquella tarde‑noche primaveral del 20 de marzo de 2014, escasos e incondicionales cinéfilos nos disponíamos a visionar El loco del pelo rojo (Lust for life, 1956), dirigida por Vincente Minnelli, en la Sala del Club de Lectura del Hospital de Santiago; mas su número fue en aumento al ir avanzando la proyección (seguramente debido a la confusión que provocó el cartel al anunciar dos horas distintas de comienzo: a las 19:30 h, en la parte superior; y a las 20 h, en la parte inferior), demostrando así el interés que este filme despertaba.