Atrasos

Por Mariano Valcárcel González.

No sé qué pasa en mi pueblo, pero es como si siempre, o casi siempre, fuésemos con el reloj atrasado, con el calendario atrasado, con mucho tiempo atrasado.

Bien que me entiendo que en Andalucía también nos vamos con bastante retraso en muchas cosas y aspectos, y estando en esta región no íbamos a ser menos (ni más) que nadie. Andalucía marcha al ralentí desde hace muchos años, siglos y en ello estamos todos incluidos.

Pongamos, por ejemplo, que nos afecta de lleno esa autovía llamada “del olivar”, que nos maldice hace ya… De promesas nunca carecimos. De anuncios repetidos en proximidad de elecciones todavía retumban nuestros oídos (ahora se renuevan). De fotos para la posteridad y amagos de que se trabaja en la misma, ya ni cuenta hay. Pero sí que hay cuenta de la cantidad de inconvenientes, molestias, deficiencias y peligros que se vienen padeciendo en el tramo que va desde Úbeda a Jaén, que nunca vemos terminado en su totalidad y que hasta evitamos en lo posible, eligiendo ruta alternativa, aunque sea más larga. Nuestros vehículos nos lo agradecen. Los políticos se ve que también, pues los votamos.

Que la depuradora de aguas sigue estancada (¡qué paradoja!) en el fango burocrático y del «A nosotros no nos toca»… Que lo del edificio de la antigua academia de la Guardia Civil ya está más que mareado y fue pasto de crédulos en promesas, al hilo de la necesidad de votos; no se hace nada ni hay intención de ello y tal vez surja la noticia de que es puesto en venta, para hacer caja el gobierno de turno.

Como pasa ahora “mismito” con la antigua cárcel del Partido Judicial. Edificio que se abandonó tras la utilización miserable que se le dio en la guerra civil, ahí a medio usar por el Ayuntamiento, que fue expulsado del mismo al no ser el dueño y este, el dueño que es el Estado, acordar su venta. Ni catalogación, ni valor histórico, ni gaitas; que se dejaron transcurrir las décadas y ahí nadie ponía iniciativa ni idea adecuada para su mantenimiento, uso y disfrute público. Y, ante tamaña dejadez, incuria e inepcia, lo que tenía que pasar ahora pasa. Yo no acuso ahora al Gobierno de querer hacer caja con este patrimonio, con las ganas que me dan, sino a los continuos gobiernos locales que, teniendo hasta vientos favorables, no fueron capaces de articular una acción decidida, al respecto. Y me da rabia que escriban o declaren ahora ciertos ex alcaldes su oposición a la venta. El Estado ya licitó la demolición y, ahora, ¡tarde!, piden en comisión catalogar este y otros edificios del municipio.

Alguien me dice: «Las cosas se hacen tarde, pero se hacen»; y habrá que admitir que ello es así y bienvenido sea todo lo que al fin se logre, pero es parco consuelo.

Si se indica ahora que en la Antigua Cárcel se podía hacer un centro social y cultural ¿a qué vinieron a hacerse varios minicentros en determinadas zonas de Úbeda, que ahora ni están utilizándose, o infrautilizados?; ¿a qué esos gastos tan inútiles?; ¿quiénes se beneficiaban de esto…? Todo el gasto (tal vez mucho menos) y la energía debió emplearse en rescatar el viejo edificio… y punto.

Nos dicen desde Fomento que librarán dinero para el carril bici que debe unir Úbeda y Baeza… Pienso que esa partida presupuestaria, más engrosada desde luego, debería emplearse en la continuación de esa maldita autovía arriba mencionada. ¡Pero vaya usted a convencer a los políticos y sus prioridades! Por lo pronto, se han cargado los árboles del León (acceso por carretera desde Baeza, y no oigo a nadie protestar) para marcar el nuevo carril bici. Todo tarde y despacio y luego casi para nada… Una victoria ciertamente menor fue la restitución del terreno que Obras Públicas tenía en la Avenida de Madrid, antaño. Lindo solar. Ahí está: solar solo e inútil. Al municipio no le reporta ningún valor, salvo que los tiempos cambien y alguien decida emplearlo en, por ejemplo, para viviendas sociales o de protección. Porque, y esa es otra, habidos los terrenos se enzarzaron en dimes y diretes y especulaciones sobre su utilización (¡ah, más centros sociales de barrio!) y no se llegó a nada.

Lo común, acá y allá, es confundir el culo con las témporas y, en aras de un supuesto purismo o conservacionismo latente, en aras de la virginidad de la mujer del césar (que debe aparentarla) y de cuatro naderías de manual dogmático, lo que puede beneficiar al común, llámese en servicios o llámese en ingresos contantes y sonantes en las arcas municipales, que no en los bolsillos de los munícipes, se desecha, se anatematiza y, a la postre, ni se come ni se deja comer. Y ahí se ve lo eficaz de esa política de medio pelo.

No me dejo olvidado el caso del antiguo cuartel de la Guardia Civil de Santa Clara. Despropósito grande, donde los haya. Hasta un concurso público hubo para diseñar la futura utilización y forma de la edificación del solar (pues prácticamente a solar quedó reducido). Ahí va para largo la cosa. Una ruina en pleno casco histórico, casi un vertedero, que desluce todo el entorno. Y, otra vez, el tema de quienes ponen los fondos o a quienes les corresponde el turno de poner su parte. Y, creo que, otra vez, hay falta de ideas.

Cierro con un leve comentario a la nueva rotonda, del lugar llamado Cuatro Caminos (que este nombre ya indica sus características), construida este agosto. Tarde, muy tarde, aunque valedera. Porque es un cruce que siempre entrañó peligro. De inicio, se pasaba a pelo. Luego, no hace muchos años y tras mucho hablarlo, se lograron instalar unos semáforos (¡gran hazaña!) que, cuando se apagaban o se ponían en intermitencia, volvían a restablecer el problema inicial. Esto de la rotonda se ve que era un gravísimo caso irresoluble, pues se acometían otras, mas no la de esta confluencia. Pues alguien, en este caso al actual equipo de gobierno, lo ha logrado (cargándose un tramo del costoso e inútil carril bici y colocando, como escribí, un buen banderón). Bien.

 

marianovalcarcel51@gmail.com

Autor: Mariano Valcárcel González

Decir que entré en SAFA Úbeda a los 4 años y salí a los 19 ya es bastante. Que terminé Magisterio en el 70 me identifica con una promoción concreta, así como que pasé también por FP - delineación. Y luego de cabeza al trabajo del que me jubilé en el 2011. Maestro de escuela, sí.

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