Todo ha evolucionado en este campo gracias a la Revolución francesa, que trajo adelanto (y también mucha destrucción). Nos habla del diseño que hizo una escuela de ingenieros francesa del paso del Despeñaperros; pues, entonces en España, no teníamos aún escuela de este tipo, pues empezó en 1850. Entonces, los constructores eran maestros de obras, canteros, etc. Y nos gasta una broma diciéndonos: «Son las doce y media y estamos acabando…».