Hay muchos documentos aquí y es un milagro que se conserven, gracias a que se han guardado. Entra por uno de ellos a la sala de al lado y nos muestra el documento más antiguo que existe en este archivo, datado en agosto de 1235; lo lee y se entiende perfectamente.
Después imparte una buena clase de historia a raíz de “La batalla de Ubadat” o “La batalla de las cuestas”, o como se le llamó después por un equívoco, “La batalla de las Navas de Tolosa”, recordando el recorrido que hace el Centro de Interpretación, instalado cerca de Santa Elena (Jaén), que lo recrea; y, como Ramón lo ha recorrido en bici y a pie, nos lo va detallando hasta con nombres propios, como si lo hubiese hecho ayer mismo.