Por Dionisio Rodríguez Mejías.
6.- Un cliente problemático.
Siguiendo el programa fijado, aquella misma tarde pasó por la peluquería a saludar a María Luisa, que se sintió gratamente halagada por la visita. Le preguntó por aquellos señores tan guapos que asistieron a su boda, y se deshizo en atenciones para con él. Por Martini no preguntó, porque ya se sabe que Martini no despertaba la admiración del bello sexo. Le dijo también que Soriano y ella le estaban muy agradecidos y echaban de menos las mañanas de los domingos en Edén Park. Le indicó con la mirada que quería hablar a solas con ella, pero tuvo que esperar a que le diera los últimos toques a la permanente que le estaba haciendo a una clienta.