Por Dionisio Rodríguez Mejías.
5.- Actitud.
La compra es una de las aspiraciones más profundas del alma humana. El dinero no tendría ningún valor si no nos permitiera adquirir lo necesario para satisfacer nuestros caprichos. Por eso, la venta es la droga más adictiva y fascinante del mundo. El reto consiste en pertenecer a un gran equipo y competir con los mejores, con los más ingeniosos, con los más listos. Cuando empecé a vender tenía muy claro que yo no era más inteligente que mis compañeros, pero sabía que era más ambicioso, que tenía más fe en el triunfo, y que quería ganar más dinero que ellos. Tuve una infancia muy difícil, y aprendí desde pequeño que no podía rendirme, que si ponía confianza e ilusión en lo que hacía, podría alcanzar las metas más altas. El ansia de triunfo es algo que se lleva en el alma, y para lo que no importa lo alto o lo fuerte que uno sea. Para triunfar solo cuenta el corazón, la sangre fría, el alma que se pone en cada frase y en cada palabra. Vender es la sustancia más adictiva que podemos consumir, y el triunfo es el éxtasis más increíble que sentimos en nuestro interior.