Por ser cabo de dormitorio estaba (además) libre de trabajar en la construcción de refugios contra la aviación o arreglo de carreteras, cuando en abril y mayo de 1938 eran trabajos voluntarios; hasta que pasaron a ser obligatorios…
Aunque este bienestar duró poco, pues, a finales de abril, ya empezaron a trasladar a las cárceles de los pueblos a algunos presos gubernativos (que eran precisamente los menos indicados, ya que su culpabilidad era casi nula para los rojos; y que estaban allí más por precaución y protección) a campos de trabajo para que hiciesen fortificaciones y construyesen trincheras. Así lo determinaron…, cuando debieron ser los condenados por los tribunales populares (e incluso los presos políticos) los obligados a realizarlos.