Por Fernando Sánchez Resa.
Cada Semana Santa depara múltiples y especiales momentos a todo cofrade, turista o visitante que desee disfrutarla, con la sana alegría de un infante, al ir descubriendo un mundo maravilloso del que siempre quedará conmovido. Muchos de ellos vienen anotados en los programas (oficiales o particulares) de cultos y procesiones, periódicos, revistas, siempre a mano, etc.; pero, seguramente, la mejor manera de sorprenderse a sí mismo es elaborar un itinerario y/o programa propio para vivir intensamente una Semana Mayor con diferente colorido y textura cada año.