Para Emilio Lozano.
¿Qué harán desde tan pronto
los pájaros rezando en los cipreses?
¿Qué corazón tendrá
dispuestas sus banderas
para saltar de gozo
o saludar con golpes
de alegría la luz
con que amanece el cántico?
¿Quién abrirá la puerta
y saldrá de su casa
con el sueño aún cosido
con agujas de abeja?
¿Quién saldrá a los caminos
a bendecir el Nombre
de los Nombres? La Vida
o Sol de medianoche
nos llenará de menta
los labios, y de rezos.