Por José Luis Rodríguez Sánchez.
Como habéis podido saber por el correo enviado por el interesado, nuestro presidente, José María Berzosa, ha dejado el cargo tras muchos años de ejercerlo con dedicación y solvencia. Todos hemos de reconocerle su dedicación y agradecer su entrega.
Lógicamente, en la asamblea del pasado 7 de junio había que adoptar una decisión. Y para evitar el vacío, asumí la presidencia provisional hasta la asamblea anual de octubre, y pedí que se mantuviese el resto de la directiva, por lo que la normalidad se mantiene.
En esta próxima asamblea, que se convocará con todas las garantías estatutarias, todos estamos llamados a tomar las decisiones que creamos mejores para nuestra asociación.
La primera, lógicamente, sobre su continuidad. Hay quien opina, legítimamente, que habría que disolverla. Otros creemos que debemos seguir con esta feliz iniciativa que algunos pusieron en marcha, hace ya unos años, que nos ha permitido recuperar amistades, aflorar recuerdos, recordar momentos muy especiales, y volver a sentir el espíritu safista que para muchos ha sido determinante en nuestro devenir humano y profesional.
Es evidente que habrá que cambiar algunas cosas, para que sobreviva la principal: nuestra amistad y camaradería. Se ha planteado reconsiderar el programa de premios a los alumnos actuales, que consume buena parte del presupuesto, y buscar otra forma más efectiva de colaborar con la Escuela y obtener de ella mejores resultados y un mayor reconocimiento. Se propone una política de ediciones de la producción literaria o articulista de los asociados. O explorar algunas iniciativas de ocio cultural aprovechando nuestras reuniones. Todas las ideas serán bienvenidas en la próxima asamblea.
Para ello es importantísima la asistencia masiva de los asociados. Comprendo que a veces puede ser difícil emprender ese viaje, pero si Stephan de Vos viene de Londres sin fallar un año, ¿cómo vamos a faltar los que vivimos, por ejemplo, en Andalucía?
Comoquiera que alguno, pese a desearlo, no pueda venir, y dada la trascendencia de algunas decisiones que adoptar, os propongo que para ellos se habilite el sufragio delegado o por correo. En una nueva comunicación os daré más detalles sobre ambas opciones. Pero lo importante es que nos concienciemos de la conveniencia de vernos en octubre, en nuestra alma mater, la escuela que nos educó y la ciudad donde desarrollamos vivencias inolvidables.
En la confianza de un encuentro pleno de satisfacciones, os envío un fuerte abrazo.
José Luis Rodríguez Sánchez
Magisterio 1970
637251095