Por Jesús Ferrer Criado.
De una manera completamente informal, entre risas y bromas continuas, nos fuimos presentando unos a otros. Sólo había otro nuevo, Marcelo Moreno López, de Ohanes y mayor que yo, al que luego, en el colegio, lo meterían directamente en primero, mientras a mí me llevaron a Preparatoria. De modo que yo me convertía en el benjamín del grupo. Todos me demuestran una gran simpatía y hacen que me sienta a gusto y protegido. Así que mi impresión fue estupenda desde el primer momento.