Después tomó el micro y la palabra José Hurtado, antiguo compañero de alguno de los homenajeados; pero su enamorado discurso y sus regalos fueron, especialmente, para la bella Rosa Mari, su platónico amor… Luego, habló Pedro Hurtado, el director del colegio “Virgen de la Misericordia”, insistiendo y recordando las cualidades profesionales y personales que adornan a los tres jubilados, aunque resaltando la bondad, la alegría y dedicación con la que Rosa Mari se ha entregado los veinticuatro años que permaneció en su colegio… Terminó con una afirmación contundente: «¡Fuera de la escuela, también hay vida…!».