Sobre la primera salida de don Quijote, 1

Por José María Berzosa Sánchez.

[Las citas las hago por Miguel de Cervantes, Obras completas I. Don Quijote de la Mancha, seguido del Quijote de Avellaneda. Edición, introducción y notas de Martín de Riquer. Barcelona, Planeta, 1962.]

RESPECTO A SU ESTRUCTURA

Externa

Se trata de una novela dividida en capítulos. La primera salida de don Quijote ocupa los cinco primeros de la primera parte. Cada uno de ellos va titulado, de tal manera que se entiende desde el título el asunto de que trata el capítulo.

En todo momento, el narrador se sitúa en una perspectiva de tercera persona, queriendo presentarnos la historia como ajena a él. Para ello utiliza los siguientes recursos:

1. Dudas en la localización y caracterización:

«En un lugar de la Mancha».
«Tenía el sobrenombre de Quijada, Quesada… Quejana».
«En este pensamiento duró ocho días, y al cabo se vino a llamar don Quijote».
«Después de muchos nombres que formó, borró y quitó, añadió, deshizo y tornó a hacer en su memoria e imaginación, al fin le vino a llamar Rocinante».

2. Utilización de términos y expresiones difusas:

«Y fue, a lo que se cree, que en un lugar cerca del suyo había una moza labradora…».
«La del alba sería cuando don Quijote salió de la venta».
«Y quiso la suerte que […] acertó a pasar por allí un labrador de su mesmo lugar».

En cuanto a la extensión de los capítulos, viene a ser muy parecida entre sí, y cada uno de ellos no es muy amplio. El primero, 6 octavillas; el segundo, 7; el tercero, 7; el cuarto, 7; y el quinto, 5.

Interna

Aparte del título de cada capítulo, todos conocemos el título general de la obra. El autor la redactó así: Primera parte del ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha.

Se diferencia del título de la segunda parte ‑en donde se narra la tercera y definitiva salida de don Quijote‑, en que utiliza la palabra caballero por hidalgo. La razón del cambio está en que don Quijote fue armado caballero en su primera salida.

El adjetivo ingenioso sí parece matizar alguna intención del autor. Podría haberlo tildado de loco, generoso, extraño…;o podría haber evitado cualquier adjetivo. El de ingenioso parece que no es peyorativo, que no menoscaba la autoridad del personaje.

Si acudimos al diccionario, leeremos cómo todas las definiciones de ingenioso, son positivas. Sin embargo, el comportamiento de don Quijote no es ingenioso, sino el de un loco que desbarata y perjudica actitudes y comportamientos ingeniosos. Cervantes usa el adjetivo con sentido irónico.

En cuanto al resto del título, el mismo don Quijote nos da sus razones ‑por boca del narrador‑ en el capítulo primero.

«Pero, acordándose que el valeroso Amadís no sólo se había contentado con llamarse Amadís a secas, sino que añadió el nombre de su reino y patria, por hacerla famosa, y se llamó Amadís de Gaula, así quiso, como buen caballero, añadir al suyo el nombre de la suya y llamarse don Quijote de la Mancha, con que, a su parecer, declaraba muy al vivo su linaje y patria, y la honraba con tomar el sobrenombre della». DQ, I, 1, 38.

A estas razones hay que añadir las siguientes:

1.  Se juega con el apellido Quijada o Quijano, al que se le añade el sufijo ‑ote, por similitud al nombre del famoso caballero artúrico Lanzarote del Lago; pero el citado sufijo siempre ha tenido un claro matiz ridículo en nuestro idioma.

2.  Quijote o muslera es el nombre de una pieza defensiva de la armadura, que cubre el muslo. Por su forma estrecha y alargada y, también, porque quijote denomina las ancas de las caballerías que, cuando están famélicas, marcan la osamenta de forma notable, hace una clara alusión a la figura del hidalgo manchego.

«Frisaba la edad de nuestro hidalgo con los cincuenta años; era de complexión recia, seco de carnes, enjuto de rostro, gran madrugador y amigo de la caza». DQ, I, 1, 33.

3.  Se antepone el don al nombre para aparentar mayor categoría social.

En conjunto, es una denominación presuntuosa y ridícula a la vez.

berzosa43@gmail..com

Deja una respuesta