Presentación del libro «Semana Santa en Úbeda»

09-01-2012.

El Auditorio del Hospital de Santiago se viste de gala hoy jueves, día 15 de diciembre de 2011, porque se va a producir la paradoja de presentar un libro de Semana Santa en estas fechas navideñas para demostrar, una vez más, que la Ciudad de los Cerros y su mundo cofradiero a la cabeza no descansa en el continuado proceso de preparación de su fiesta religiosa primaveral por excelencia…

A las nueve y cuarto de la noche van apareciendo el autor y las autoridades que presidirán el acto. Antes se ha estado charlando largo y tendido, esperando el irrepetible momento. En un instante se hace prodigiosamente el silencio. Sentados en la mesa presidencial ya se encuentran Juan Ramón Martínez Elvira, autor del libro que hoy se presenta; José Ramón López-Agulló Lendínez, Presidente de la Unión de Cofradías; y el alcalde de Úbeda, José Robles Valenzuela, frente al público expectante.

José Ramón López-Agulló toma la palabra y da las gracias a todos. Lee un sentido discurso resaltando el encomiable esfuerzo que ha supuesto la elaboración de los dos tomos de “Semana Santa en Úbeda” en diez años de trabajo. Hace un acertado panegírico del autor como profesor, pregonero, conferenciante, cofrade, estudioso de la historia local, paisano amante de su tierra y tradiciones… resaltando las múltiples horas de obra divulgativa y científica que ha dedicado a nuestra ciudad a lo largo de su vida. Luego realiza un estudio pormenorizado del libro, cuya lectura comenzará a disfrutar en breve, afirmando: «Habrá que hacer un hueco en las librerías para albergar y saber del hecho religioso de nuestra Úbeda…». Refiere los prólogos de Felipe Toral y de José Luis Latorre… como génesis de este proyecto.

Se siente orgulloso de que los dos volúmenes salgan a la luz sin patrocinio de nadie, solamente con las únicas fuerzas de la Unión de Cofradías. Da las gracias a Paco Leiva, Blas Molina Reyes y, especialmente, a Manuel García Villacañas por el bonito forro -de ambos tomos- donde ha conformado un completísimo collage de todas nuestras cofradías semanansanteras.

Invita a todo el mundo a que adquiera la obra, la comente y la lea. Según nos comunica: «En ella quedan reflejados el fervor, la pasión, la devoción… con la que Úbeda vive su Semana más grande…». También nos proporciona una confidencia personal: lleva treinta y un años de amistad con el autor de esta obra, desde que se conocieron en el Hotel Victoria de Madrid con motivo de premios anuales Gavellar, cuando sólo tenía 14 años. Por último, dedica a Juan Ramón palabras cariñosas y agradecidas, acabando con una despedida que es ovacionada por el abundante público asistente…

Ahora le toca el turno al autor de la obra, Juan Ramón Martínez Elvira. «Buenas noches», son sus primeras palabras. Y prosigue: «Después de lo expresado por el Presidente de la Unión de Cofradías, como gran amigo, no sé lo que yo tendría que decir». Da las gracias al alcalde -«Pepe Robles, para los amigos»- por su asistencia, haciendo lo mismo con las palabras de José Ramón llenas de entusiasmo y cariño hacia su persona. Confirma los 31 años, desde que comenzaron sus amigables relaciones en la Plaza de Santa Ana y remata: «Hoy él me devuelve ciento por uno en un alarde de generosidad…».

Da las gracias, también, a todos en esta noche de diciembre y entra a hablar de “la criatura” que hoy nace públicamente… Hace una mención especial a Pepe Pino (Hermano Mayor de la Caída) y, siguiendo con el símil, afirma: «El embarazo ha sido larguísimo, desde el 1998 hasta hoy. Su gestación ha sido normal, pues había que ver mucha documentación, revistas y periódicos… La criatura quería nacer y no venían las contracciones, por lo que hubo de volver al líquido amniótico hasta que llegó este ginecólogo (José Ramón) para provocar el parto con fórceps. La criatura rompió aguas y Gráficas Minerva se puso manos a la obra, aunque la edición se acabó en junio del 2010. Ya está aquí y bien venida sea a su casa…». El público sigue, con agradable sonrisa, la metáfora escogida por el autor para referirse a su doble hijo de papel…

Juan Ramón recuerda que la paternidad ha sido múltiple, pues todo empezó por José Luis Latorre Bonachera, quien pensó que iba a ser una edición a base de buenas fotografías para que él simplemente pusiese los pies de página… Cuando entró Felipe Toral Valero, pretendió que se le incorporase un texto y se puso a la tarea. «La criatura tuvo que ser alimentada…». Agradece, primeramente, a Antonio del Castillo Vico que le proporcionase multitud de datos y listados; luego, a Pedro Mariano Herrador Marín, «gesto insólito en la historia de la humanidad, que me entregó todos los disquetes disponibles y me dijo que hiciera con ellos lo que quisiera, sin pedirme nada a cambio, lo que agradezco profundísimamente». Según nos refiere, sus datos llegaron hasta los 70, por lo que el pequeño vacío que resta hasta hoy hubo de rellenarlo principalmente mediante las aportaciones de Rafael Merelo Guervós y Eugenio Santa Bárbara a través de periódicos, páginas web y revistas que le aportaron el material que le ha servido para completar estos últimos años, «por lo que se lo agradezco a ambos…».

Da las gracias a todos: «Muchos, que están aquí en la sala; y otros, que no han podido asistir, pero que me han suministrado lo que les he pedido». Tiene emotivas y agradecidas palabras para Luis Monforte, que le abrió desinteresadamente- su casa y sus archivos para que consultase toda la documentación cofrade que precisase. «¿Cuál ha sido mi función, entonces?», se pregunta, y prosigue: «No soy yo el padre de la criatura, pues ha habido mucha gente ayudándome; he sido el “escribidor” del libro, no el escritor (pues abusamos inadecuadamente de esta categoría de palabras como impronta, héroe, poeta, escritor…)».

Y añade: «Como ya José Ramón ha descrito y desglosado magníficamente los contenidos de la obra que presentamos, es inútil volver a hacerlo, pues mejor sería consultar su índice…».

Martínez Elvira cree que esta publicación tiene dos características peculiares:

Primera: que la ha hecho sincrónicamente (sobre un tema determinado, girando sus fechas a su alrededor); mientras que Pedro Mariano Herrador, en su extensa obra, la ha trabajado diacrónicamente (año por año), aunque ambos modos de tratar la Semana Santa de Úbeda sean complementarios.

Segunda: la ha impregnado de cierto espíritu didáctico (pues toda su vida se ha dedicado a la enseñanza), incluso es un libro en que, sin ser experto, se ha atrevido tocando temas doctrinales y catequéticos y haciendo descripciones de tronos, útiles, capillas… Nos comunica que hasta se ha metido en el terreno de la música: diseccionando y/o estudiando las marchas de Semana Santa, ayudado primero por Manuel Antonio Herrera Moya en un alarde de generosidad más por su parte, incluyendo las obras musicales de don Emilio Sánchez Plaza y don Victoriano…; y, también, por don Gabriel Barbero de la Blanca e hijo, entre otros. Se lo agradece mucho a todos. «Ese afán didáctico le ha llevado a poner un apéndice con tronos, ruedas, etc.».

Sólo le queda ya hablar de los aspectos externos de la criatura. «Es de justicia -nos recalca- decir que la presentación es excelente: papel muy bueno, la edición magnífica, incluso con su cinta roja para señalar el punto de lectura, sus cubiertas y sobrecubiertas con tacto y sabiduría, como todo lo que hace Manuel García Villacañas. ¡Es un artista de categoría…!».

Hay 400 fotografías en las que vienen reflejadas la impronta de José Luis Latorre y otros importantes fotógrafos, contando incluso con la colaboración de aficionados (Luisa Sánchez, por ejemplo). En principio, se pensó imprimirlas en color; pero, al ser una edición costosa, no hubo más remedio que hacerla en blanco y negro.

Se sincera afirmando que termina una etapa su vida («Se me quita un peso de encima») y que todo es mejorable. Aunque, lo que a él personalmente- le hubiese gustado escribir, hubiese sido: «Que, el Viernes Santo por la noche, saliese la procesión del Santo Entierro sola y luego se encerrase en la Iglesia de la Trinidad, velándola los soldados romanos de la Humildad durante toda la noche; y que el sábado -por la noche- saliese acompañada de todas las cofradías ubetenses en la Procesión General…». Es decir, que se construyese y consolidase un tipo de Semana Santa autóctono de Úbeda y que no hubiese tanta profusión de horarios, itinerarios y cofradías en la calle, como si nuestra ciudad fuese otro lugar de la baja Andalucía… En definitiva, que la Semana Santa de Úbeda hubiese adquirido un estilo peculiar e indeleble.

Ahora le queda otra etapa: luchar por lo que hay que decir, si alguien quiere escucharlo y relacionarse con las distintas cofradías. La Semana Santa de Úbeda ha de llegar a ser algo único e inédito.

Renacen los sentidos aplausos de una forma espontánea por el magnífico parlamento, cuasi improvisado y bien representado como buen aficionado al arte de Talía que es , que el autor ha regalado al embobado auditorio.

Finalmente, el alcalde de la ciudad toma la palabra para clausurar el acto. Reconoce a Manuel García Villacañas su colaboración por todas las obras pictóricas religiosas regaladas: 14 obras de arte, sus plumillas… y «especialmente esa maravillosa composición fotográfica, a todo color, de todas las cofradías ubetenses que ha puesto la guinda a esta enciclopedia». Y resalta: «Lo del título del libro da igual, pues prácticamente vivimos en Úbeda todo el año, los doce meses, con algo de Semana Santa».

Afirma que es un libro encomiable, editado por la Unión de Cofradías y que expresa el sentimiento de Úbeda, porque somos especiales… «Todos debemos de estar de enhorabuena, pues Úbeda respira Semana Santa por los cuatro costados. ¡Felicidades para todos! ¡Muchas gracias!».

Seguidamente se hace entrega a Juan Ramón y a García Villacañas de sendos regalos alegóricos a su actividad literaria y artística, respectivamente, salidos de la inspiración de otro artista local, el ceramista Pablo Tito, pues el barro y el agua, amasados con sus expertas manos, siempre recordarán al escritor y al pintor este emotivo acto navideño-semanasantero…

Ya disponemos -tantos los ubetenses como todos los amantes de nuestras tradiciones- de un nuevo legado de nuestra Semana Mayor -en dos tomos-, donde la fotografía, el texto bien elaborado, la investigación rigurosa, el amor tierno y desinteresado de su autor a la ciudad que le vio nacer… demostrarán que esta enciclopedia no debe faltar en ninguna biblioteca particular, institucional o cofradiera…

Úbeda, 15 de diciembre de 2011.

fsresa@gmail.com

Deja una respuesta