22-07-2011.
En aquel día de enero de 1921, escribe el historiador y periodista Manuel Leguineche: «La animación en la calle Larios de Málaga era extraordinaria. Soldados y familiares, padres, novias, hermanos y amigos llenos de entusiasmo patriótico, daban o escuchaban las últimas promesas de escribir cartas desde los campamentos, las aldeas del Rif, incluso bajo el fuego de los francotiradores…».
No se imaginaban lo que les esperaba.