02-03-07.
Se nos pasa la vida
tras los cristales de esta Navidad tan lenta,
oyendo a Boccherini en cada minuetto,
o masticando el turrón de la soberbia.
Cada recuerdo nos hace zambullirnos
en la gente que pasa sin mirarnos,
bebiendo aquella sidra achampanada,
o devolviendo saludos y merry christmas.
Se nos pasa la vida
en cada cigarrillo arrepentido
por no poder parar su punta-fuego,
o porque estamos rellenos de aluminio.
Se nos pasa la vida
deshojando el segundo villancico
en esta mesa incolora
de la hora de té no compartida,
o porque el remordimiento nos tira de las orejas
y se enreda en la yedra del vacío.
Se nos pasa la vida,
mientras ruge ese monstruo de la sombra
y nos dice que no, que estamos locos,
que un pesebre, una estrella, una caricia
no existe en Navidad. Sólo un deseo,
un disfraz, un infarto, un cosquilleo.
Se nos pasa la vida
en esta Navidad de puntos suspensivos.