Estrenamos un nuevo año, aunque seguimos con las no tan novedosas ideas y/o costumbres que nos están imponiendo a marchas forzadas de un tiempo a esta parte. Todo es empoderamiento del nuevo-viejo poder disfrazado que, con sus múltiples tentáculos, nos abraza, asfixia y domina por todos lados.
Somos pequeños y obedientes peones de una súper estructura, no tan secreta, que intuimos y comprobamos cómo cada día nos envuelve y atenaza más «cariñosamente»…