Bien, paisanos (también paisanas, no vayamos a meterla), que como les escribía anteriormente es fecha de tener ya hecho el plan veraniego y no se me han de despistar de ello.
Precisamente, unos de los más socorridos son aquellos que tienen por base la inclusión en cualquier excursión o viaje colectivo. Se puede optar por los tan ya asequibles cruceros, verdadera proletarización de los otrora glamurosos y carísimos, y verdaderos, cruceros. Que con la proliferación de navíos espectaculares (verdaderos hoteles flotantes con vistas) que permiten prescindir de esos camarotes bajo cubierta y bajo, casi, del agua, claustrofóbicos, y que transportan pasajeros a miles, todos creyendo que el capitán cenará con ellos en su mesa, pues es una opción muy solicitada y relativamente barata. Unos días de experiencia arquimédica.