Mi mente debe ser bastante obtusa para llegar a comprender, siquiera de modo básico y sucinto, la razón de la situación actual y el porqué se sigue repitiendo como un mantra muy atractivo y absoluto aquello de que «todos hemos vivido por encima de nuestras posibilidades»… Que se emite junto a la necesidad imperiosa de «austeridad». Así, en seco y sin anestesia, se viene dando cuerpo legal (?) a lo anterior, justificando lo segundo con lo primero. Y tan pimpantes los que eso dicen, deciden y aplican, que a ellos (que sí, que nos comprenden a los demás) no les alcanza la marea negra; máxime, porque ya han procurado que eso no les ocurra. Y la espectacular fuga de capitales lo corrobora.