Por Manuel Almagro Chinchilla.
San Miguel – Úbeda, 18 km.
El día 3 de julio, mucho antes del amanecer, salimos de San Miguel con dirección a Úbeda. Previamente la alcaldesa, Pepa, se prestó voluntariosa a hacernos café, lo que le agradecimos efusivamente.
En el período de preparación de la ruta, ya vimos que no era posible utilizar el camino real conocido como “El paso”, entre Úbeda y Quesada, al estar invadido con plantaciones de olivos. Sería una buena labor reclamar de la Administración la restitución de este patrimonio público que ha sido usurpado. Esta vía contaba con un puente sobre el Guadalquivir, “Puente la Reina” (desaparecido; hay personas mayores que han oído hablar de su existencia), que estaba situado en las inmediaciones del mencionado vado del episodio del artículo anterior, donde también hay una central eléctrica de Sevillana. Tuvimos que seguir otros caminos, de los distintos que conducen a la Ciudad de los Cerros.
Al esclarecer el día, se divisa Úbeda en lo alto de La Loma, ya iluminada por el sol. Me vienen a la mente unos versos de Juan Pasquau Guerrero en su obra “Biografía de Úbeda”:
«Úbeda no es una ciudad perdida en el campo. Vista desde lejos, desde el valle del Guadalquivir, parece, más bien, como si el campo se elevase, votivamente, al cielo.
Resultaría poéticamente natural que, a semejanza de la nuestra, todas las ciudades se alzasen sobre un plinto geográfico. Como una ofrenda desafiante a los vientos, como un airón, como una grímpola de triunfo en las eminencias insólitas…».
La jornada finalizó en la capital de La Loma; todo un lujo pasar por parte del casco histórico de la ciudad Patrimonio de la Humanidad. Nos invitaron a comer en la finca de Sebastián González e Isabel Almagro (mi hermana), donde también disfrutamos de un refrescante baño en la piscina. Tuvimos el privilegio de pernoctar en el Hospital de Santiago, por algo es un hospital y por algo se llama de Santiago. Para ello nos asignaron el salón de actos Julio Corzo para pasar la noche y hubo a quien no le fue fácil conciliar el sueño, pensando en los fenómenos paranormales que en más de una ocasión se han manifestado esporádicamente en el monumento.
Como dato histórico, decir que este día tomó posesión de la alcaldía de la ciudad el socialista Marcelino Sánchez, que relevaba al popular Juan Pizarro.