A MI HIJO.

A mi hijo.



(Disminuido en su 
expresión y rico en amor )


Maravilloso niño,

cuánto te quise,

lucero de mis sueños,

te recuerdo… ,

estrella del firmamento,

tan radiante,

ángel de mis amores,

tan risueño.


Contigo fui tan feliz,

más que en los sueños.

Fuiste mi amor y luz

y mi embeleso.

Fuiste tú mi refugio

y mi consuelo.


¡Cuánta dulzura diste,

y cuánto anhelo!

Por ti yo daría el alma,

en regresarte,

y soñar junto a ti

que nos queremos.

Sendero Luminoso

Sendero Luminoso


Entre la plomiza y áspera ciudad …;
entre filas de altos edificios,
farolas, semáforos, asfalto,
veo la luz del astro que se aleja,
amarilla , blanca y dorada;
¡ Bella y luminosa,
alba … y despejada
Y, ¡ Oh belleza !,
¡ Un sendero , entre árboles, aparece …!
un sendero ocre y brillante,
amarronado , bonito…;
un sendero bello, entre ramas
cruzadas, que forman pasadizo
que conduce a un fondo amarillo,
albo y brillante,
donde el sol va entrando en el ocaso
y el alma conecta con suspiros,
ensueños y quimeras
transportándola , Feliz,
hacia el Olimpo ….

Pedro Pablo Vico Robles