
Nunca ha estado en mi ánimo crear ni alimentar la crispación en este Rincón. Me he limitado a seguir en el mismo tono en que lo encontré; pero parece que mis intervenciones no han sido muy afortunadas. Lo siento. Mantener una correspondencia epistolar en este ambiente no es bueno ni para la salud, que es lo más importante. Por eso voy a ser extremadamente breve en la que, quizá, sea mi última intervención.