El mito de la fe
y de la vida, y de la voluntad en ristre.
del vaquerío alocado en arias tristes.
Y he arrendado mi arnés y mi bacía,
dispuesto a lancear la venta
y a secar la ventera de molinos
con el aljibe de sierra.
por el penúltimo vagón de mercancías,
camino de Sigüenza.
El silbido La parada El chirrido
La mirada El quejío La salida
El berrido La querida El chasquido
de aquella larga galería de metal…
camino de Sigüenza.
de versos fugaces
por un Henares de secano y roca
con pedernal de Alcarria.
Un castillo ruinoso en Jadraque,
machadiano zaguán de Soria y Duero
y presentido amor. En Jutamilla, un túnel
de tiempo indescifrable. Una bajada
en el Baides raíl de los meandros,
con sabor a caramelo de menta y a ducados…
camino de Sigüenza.
los arcos
la miseria
los conventos
las piedras
los medievos
las sotanas
las cruces
los conjuros
las aguas tridentinas
los huesos seculares
la esquina anacoreta
el sabor a cilicio derretido
en cada techo rojo por el hambre
el agua bendecida
el vino añejo
por la miel de las velas
y la cera que arde…
camino de Sigüenza.
del antiguo desfile en las hileras
por los blancos espejos de la Yedra!
¡Ay antiguos maitines de colegio
con antiguos pronobis en latín!
¡Ay antiguo paisaje de la Safa
desde antiguos hisopos en el Deán!
del farol apagado en “la Siberia”,
el lento silabeo de la pena
ante el mudo corazón de Poli,
y una mano sotana en la bragueta
entre miedos y rezos.
que deshoja a Baeza carantoñas.
Úbeda andaluza, retama de Castilla
por los anchos caminos de olivares,
Úbeda jaenera, corazón de Aznaitín
por los cerros del plateresco campo,
Úbeda testigo, piedra de campana
escondida en la faz de Sierra Mágina.
Gota a gota el ozono se subía
por aquellas paredes de metal,
beso a beso la fiebre nos curaba,
eslabón otro tiempo por la Loma,
paso a paso el peralte acariciaba
la facundia solemne del palacio.
de las lindes soberbias, las vasijas
del blasón y el esparto, de los sotos
que pasaron mil gracias derramando…