Canciones con historias – 4: Bob Dylan, justicia poética

Canciones con historias – 4: Bob Dylan, justicia poética.

Una peculiaridad de Dylan es que se inspiraba en historias de la sección de sucesos en la prensa para escribir sus canciones y en general optaba por las más injustas. Veamos dos casos:

Hurricane” narra la vida del boxeador Rubin Carter, acusado injustamente de un triple homicidio y que pasó 19 años en la cárcel. El juicio fue un remedo de justicia: le condenaron por ser negro, mientras el autor, un delincuente conocido, blanco y con buenas relaciones, se libraba. Y no fue en un estado racista del sur, fue en New Jersey.

Pero en los años posteriores comenzaron a surgir numerosas controversias sobre el caso, relativas a la falta de evidencias y a lo cuestionable de la veracidad de las declaraciones de algunos de los testigos. En su autobiografía, Rubin Carter mantenía su inocencia, y su historia llevó a Bob Dylan a visitarle en la prisión de Rahway State en Nueva Jersey. Tras ello, comenzó a escribir, pero no le resultaba fácil plasmar en una letra las sensaciones recibidas. Finalmente Bob Dylan desarrolló la canción con un marcado estilo cinematográfico.

Publicada en el LP Desiré en 1976, dio a conocer públicamente su caso, generando el apoyo popular para la defensa de Carter. Durante el tour que precedió al lanzamiento de Desiré, Bob Dylan y su banda ofrecieron un concierto benéfico en el Madison Square Garden de Nueva York y otro en el Astrodome de Houston. Como señal de protesta, actuó con la cara embadurnada de blanco, para resaltar el racismo existente en la sociedad americana.

Concierto en el Astrodome de Houston

La canción recaudó suficientes fondos y la publicidad necesaria para ayudar a Rubin Carter en nuevas acciones legales. A pesar de obtener el derecho a un nuevo proceso, Rubin Carter y John Artis fueron encontrados otra vez culpables y condenados a dos cadenas perpetuas consecutivas (la mitad de la condena anterior). No obstante sus esfuerzos dieron resultado: en 1985 un juez federal dictaminó que la Fiscalía había actuado de mala fe durante los dos juicios anteriores, y ordenó su libertad. En 1988 le fueron retirados todos los cargos.

Bob Dylan visita a Carter en la cárcel

Lo curioso es que tras el concierto de enero de 1976 en Houston, Bob Dylan nunca ha vuelto a tocar en público dicha canción.

Este caso inspiró también la película The Hurricane (1999), de Norman Jewison.

“Here comes the story of the Hurricane,
The man the authorities came to blame
For somethin’ that he never done.
Put in a prison cell,
but one time he could-a been
The champion of the world.”

 («Ésta es la historia de «Huracán»
el hombre a quien las autoridades culparon
de algo que nunca hizo.
Metido en una celda de una prisión,
un día hubiera podido ser
el campeón del mundo.”)

En “The Lonesome Death of Hattie Carrollnarra cómo una camarera negra, madre de 10 hijos, murió en 1963 tras ser atacada por un cliente blanco, joven, borracho y rico, William Zantzinger, quien confesó haberla golpeado en la cabeza con un bastón porque ella se demoró en traerle su trago.

Increíblemente el hombre sólo fue condenado a seis meses de cárcel (que evitó porque su defensa alegó que Hattie murió por una enfermedad previa, hecho falso) y una multa de 500 dólares (que no pagó). La explicación: el asesino era blanco y rico, y la víctima era negra y pobre. Al menos quedó el consuelo de que el asesino, Zantzinger, aseguró que la canción de Dylan le había hecho la vida imposible.

“Got killed by a blow,
lay slain by a cane
that sailed through the air

and came down through the room
doomed and determined

to destroy all the gentle.
And she never done nothing

to William Zanzinger”

 (“Fue asesinada de un golpe,
asestado por un bastón
que surcó el aire cayendo
después de atravesar la habitación,
condenado y destinado
a destruir todo lo noble.
Y ella nunca le había hecho nada
a William Zanzinger”).

 

 

Autor: José Luis Rodríguez Sánchez

Presidente de la Asociación de Antiguos Alumnos de Magisterio de la SAFA de Úbeda (AAMSU)

Un comentario en “Canciones con historias – 4: Bob Dylan, justicia poética”

Deja una respuesta