En tiempos difíciles y revueltos (como los que vivimos actualmente en España y en el mundo), la mente siempre se agarra a algo que le proporcione bienestar y contento para que la vida le sea más llevadera y menos monótona y triste. Así se aumenta la propia resiliencia…
Por eso, ahora, me estoy acordando de la excursión gratuita que hicimos, tiempo ha, al yacimiento arqueológico de Cástulo (Linares) para pasar una jornada entretenida, culturalmente agradable y bastante calurosa, pues el verano quería ya empezar a devorarnos en aquellas planicies desconsoladas. Todo ello, gracias a la gentileza del Museo Arqueológico de Úbeda, de la mano de su irrepetible y dinámica directora, María del Mar Capel, que actualmente está de vuelta trabajando en su tierra almeriense, tras los muchos años de servicio incondicional a su amada Úbeda. Nunca podremos los ubetenses agradecerle bastante su extenso servicio.