20-05-2012.
Hasta dos años después no estuvo todo a punto. El gringo O’Reilly había conseguido varias victorias con dos de sus gallos, Malaspenas y Trompeto, tanto a uno como a otro lado de la frontera. Siempre lo acompañaba Lisardo, que se había convertido en un buen soltador, mientras que Feliciano quedaba en la gallera junto a la coreana Wu. Vigilante y custodio.