El pasado domingo, 27 de noviembre, tuve el gusto de asistir al Paraninfo de la Antigua Universidad de Baeza para zambullirme de lleno en SONES DE PALACIO Y DANÇAS DE RASGUEADO de la mano del conjunto Laberyntos ingeniosos, compuesto por Xavier Díaz-Latorre, guitarra de cinco órdenes y Pedro Estevan, percusión. El frío de la sala hizo extrañarse a los artistas, pues no creían que, estando en Andalucía, fueran a sentirlo tan de veras…
La intimidad del público asistente, en su mayoría forastero, que aprovechaba el fin de semana para desplazarse a este bello conjunto monumental y artístico ‑emparejado‑ que conforman Úbeda y Baeza; las originales improvisaciones de los intérpretes, que cosecharon el aplauso encendido del entendido público por su exquisitez en la ejecución; su tímbrico tono y su añoranza del pasado, que los instrumentos musicales utilizados y las fuentes musicales en que se basaron permitieron conformar un universo musical y sonoro especial. Y más, dentro del lugar en que se produjo, puesto que hizo más que deleitar a los escogidos asistentes que salieron bien satisfechos y hambrientos del condumio autóctono. Gaspar Sanz, Santiago de Murcia y Francisco Guerau fueron los escogidos inspiradores musicales de este delicado concierto.
El miércoles, 30 de noviembre, el Auditorio del Hospital de Santiago se vistió de gala, albergando a un nutrido y completo grupo de escolares de primaria de todos los centros ubetenses, que asistieron ‑con expectación no contenida‑ al magistral concierto didáctico que MÚSICA PRIMA, con Francisco Orozco, director, y Lola Botello, narradora, les ofreció.
Hicieron las delicias de los escolares resumiendo, en poco más de una hora, la historia de los entrecruzamientos musicales que se produjeron gracias a la conquista de América por Hernán Cortés. Lo consiguieron de una manera sumamente didáctica y lúdica, haciendo partícipes a todo el alumnado, incluso cuando, al principio, comenzaron subiendo al escenario varios escolares de los muchos voluntarios que alzaron la mano para conseguirlo…
El travestismo que la narradora regaló a los escolares, cambiando de personaje en el propio escenario, gozó del gusto y la atención de los niños, que disfrutaron acompañando, palmeando algunas canciones y tarareando otras, siempre con el hilo conductor de la narradora y los intérpretes, que supieron presentar sus instrumentos y melodías de forma harto atractiva y sencilla.
Resultó toda la sesión un cuento musical documentado Del Amazonas al Guadalquivir: Músicas sagradas, mestizas, europeas y afroamericanas. Todo el público salió flotando como si hubiese estado en una nube, pues en ese corto tiempo se había condensado una dramática historia de conquista, donde no sabíamos bien quién fue el conquistador o el conquistado, con final feliz y pedagógico, mediante una miscelánea de músicas de uno y otro lado del océano Atlántico, que siempre se recordará y/o servirá de armazón para que los pueblos se entiendan y se comprendan en todos los campos, especialmente en el musical, que tanto une a la humanidad con su lenguaje universal y festivo.
Han sido dos conciertos magníficos, cual botón de muestra de lo que se puede ofrecer a públicos selectos o sencillos, donde la improvisación, el rescate de antiguas partituras y la mezcolanza de melodías y ritmos han mostrado sendos cuadros musicales característicos de estas dos ciudades, Patrimonio de la Humanidad, que hasta en el campo de la música tienen ya conquistado su lugar de honor en el firmamento español y europeo.