30-11-2010.
Escrito en fase de maquetación y revisión ortográfica estaba el libro que hoy tienes en tus manos, cuando ha sucedido algo que, porque no acepto jamás la «casualidad», debo considerar como el último aldabonazo, la postrera llamada, el definitivo indicio que desde las alturas nos llega a la sociedad andujareña en orden a nuestro Símbolo Sagrado, la Virgen de la Cabeza: la aparición de un óleo, pintado en el año 1940 y firmado con la rúbrica de un tal Carbonell, que tuvo el pulso firme y el corazón limpio para escribir un mensaje en el mismo óleo, donde en el ángulo inferior izquierdo se puede leer «Acto heroico de ocultación de la Virgen de la Cabeza».