31-08-2009.
Hace casi un mes que no leo la página web como Dios manda, porque internet aún no llega a todos los rincones de nuestra vieja y querida España. A uno, que pasó tanto tiempo solo, como un perrillo siete leches, pobre y vagabundo, sin una mano amiga que le acariciase ni de día ni de noche, le gusta compartir la lectura de algunos artículos con su mujer, y a ella le encanta reconocer a los autores en las fotos que encabezan los escritos.