31-10-2008.José Fernández Rueda.
(Leídos por su hijo Francisco Fernández Martinez en la Asamblea de 2008)
AGRADECIMIENTO A LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS DE MAGISTERIO DE LA SAFA DE ÚBEDA
En mi intención estaba haber acudido tanto al homenaje que hoy se tributa a los padres Villoslada y Talavera por el Excmo. Ayuntamiento, nombrándoles Hijos Adoptivos de Alcalá la Real, como a esta Asamblea de la Asociación, para haberos agradecido personalmente vuestra deferencia conmigo, al nombrarme Socio Honorífico a propuesta de Enrique Hinojosa. Pero, parangonando un conocido refrán popular «el hombre propone, Dios dispone y, en este caso, los achaques de la edad ‑97 años‑ descomponen».
Así que, contando de antemano con vuestra benevolencia, y a través de estas palabras, quiero expresaros mi profundo agradecimiento por haberme distinguido con el nombramiento de Socio Honorífico y haberme concedido la medalla de la Asociación de Antiguos alumnos de Magisterio de la Safa de Úbeda. Así como mi reconocimiento personal por haberla fundado.
Estoy convencido del valor y potencialidad del asociacionismo en general, y cómo no, de esta Asociación en particular, para mantener, potenciar y extender las ideas, los valores, el espíritu y la confianza sin límites en la divina providencia que el padre Villoslada quiso para sus Escuelas. No en vano yo puse en funcionamiento, en la Safa de Almería, la Asociación de Padres del colegio, en unos tiempos en los que no era en absoluto habitual.
Gracias, de forma muy especial a Enrique Hinojosa por el exagerado panegírico con el que os propuso mi nombramiento. Soy yo el que le tengo que estar agradecido por su dedicación, su espíritu y su buen hacer, como persona y como maestro, en las tareas que compartimos cuando pasó por la Safa de Almería. «Gracias, Enrique, por haber sido un excelente compañero».
Para terminar, y reiterando mi agradecimiento a todos vosotros, alentaros a que continuéis adelante con esta Asociación. Sé del trabajo, dificultades y dedicación que ello conlleva.
Gracias a todos.
EN AGRADECIMIENTO Y RECONOCIMIENTO AL PADRE VILLOSLADA
Cuando, a través de la Asociación de Antiguos Alumnos de Magisterio de la Safa de Úbeda, tuve conocimiento del nombramiento de los padres Villoslada y Talavera como Hijos Adoptivos de esta bella ciudad, mi primera intención fue la de acudir personalmente para unirme al homenaje que hoy le tributáis. Pero mi estado físico ha podido más que mi voluntad. No en vano tengo cumplidos los 97 años.
Pero, a pesar de ello, no quiero resistirme a estar presente en este acto, aunque sólo sea a través de mis palabras, y así poder tributarles mi profundo agradecimiento, como uno más de aquellos primeros colaboradores que tuvimos la suerte y el honor de haber sido elegidos por el padre Villoslada para poner en marcha “sus escuelas”: las Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia.
Agradecimiento no sólo como andaluz y almeriense, sino también profesional y personal. Como andaluz y almeriense porque “sus escuelas” han posibilitado la educación y promoción social de los hijos de las clases trabajadoras de nuestra tierra, entre ellos, mis hijos.
Agradecimiento profesional y personal porque el padre Villoslada, poniendo su confianza en mi persona al darme la Dirección de las Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia de Almería hasta mi jubilación, me permitió, de esta manera, que desarrollara mi vocación como maestro al servicio de los niños más necesitados de mi ciudad.
Para finalizar, no quiero dejar de felicitar y agradecer a Rafael Hinojosa, como Concejal de Cultura, y al Excmo. Ayuntamiento de Alcalá la Real, por el homenaje que hoy les rinden, nombrándoles Hijos Adoptivos de esta hermosa ciudad que tanto sabe de su entrega, dedicación y desvelos en pro de la educación de sus hijos.
Los padres Villoslada y Talavera fueron, son y seguirán siendo un ejemplo vivo de entrega y dedicación para todos los que nos hemos dedicado, y aún se dedican, a la educación de las futuras generaciones de andaluces.
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